martes, 25 de febrero de 2014

Todo a un más surrealista

Hoy me acordé de un viejo amigo. Todo comenzó en mitad de clase cuando estaba yo a mi rollo, en otras palabras, estaría empanado, y de pronto escuché como alguien cantaba la melodía del PP. Lo busqué con la mirada y era el gay de mi clase, si todo muy surrealista. Se trata del típico que parece normalito pero en cuanto le das algo de confianza es toda una locaza. Total, el chaval me recordó a un viejo amigo al que le perdí el rastro hace un par de años. 
Este chaval, amigo mío, también se dedicaba a cantar y bailar la melodía del PP, pero creo que este sí que lo hacía más enserio que el de mi clase. Era algo fachas el cabrón, pero aun así en el fondo era buena gente, aunque lo que dije anteriormente, le perdí el rastro cuando repitió un curso. Yo seguí avanzando y el quedo atrapado en ese curso. 
Lo último que escuché de él es que a los dos años o así, no sé fijo, dejó el instituto, se traslado a vivir a Granada la vida, así por la cara, porque creo que no tenía ni la ESO y que se casó con un tío. Todo a un más surrealista que antes.

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